viernes, 6 de julio de 2007

Soy de las personas que necesitan cerrar algunas cosas.
Entraba en estado crítico cuando me faltaban pocas figuritas para completar el album, entonces empezaba a romper frenética e insistentemente las pelotas para que me compren los sobrecitos... La fórmula era simple: cuanto mejor te portabas, más sobrecitos, entonces uno empieza su formación sicótica... y logra que le compren 4 en vez de 3, a base de chistes y favores.
Te compran los sobrecitos, y los abrís con una emocioooon!!! late, late, late, late..... (abreviación de "la tengo") un garrón!
El día de tu primera comunión en un colegio laico, salis a saludar al atrio, con vestido blanco pero no tan radiante y habiendote sacado la duda de "qué gusto tiene la ostia" y de pronto (no le ves la cara a Dios)..... pero sí ves a una gordita, de brazos cruzados sobre la panza con actitud prepotente, parada justo adelante del teléfono naranja de ENTEL (el del disco y el tubo gris) y le brilla "la 64" en la mano!!!!!
Porque siempre estaban las yeguas a las que les compraban 20 sobrecitos por día, se porten como se porten y andaban con el bolsillo del delantal blanco rebalsando de fichus, caminando por el patio como si fueran dealers, con el oro en el cuello, en cámara lenta, suena 50 cents de fondo....
Es la última fichu que te falta para completarlo! entonces sigilosamente te dirigís a ella, con carita de desinteresada, para negociar mejor..... y le ofrecés tooooodas tus fichus por la 64, las sacas del bolsillo, inundando el ambiente a raspá y olé. Ella, sin mirarte a la cara dice: "late late late late" y después de una ardua negociación cerrás el trato, LA 64, por todo el mazo + 2 paquetes de arroz inflado + 1 tira de fizz (con 2 violetas)....
y te vas a tu casa agotada, a finiquitar el asunto pendiente!!!

Cuando estás embadurnando obsesiva y prolijamente la 64 con voligoma, tu endiablada hermana, chistosamente, te saca la fichu envoligomada y sale corriendo....

Bizzzzzca de ira salís a correrla, a alcanzarla ..... para matarla!!!!!! pero patinás en el laaaargo pasillo de madera recién encerado y caés con todo el peso de tu cuerpecillo sobre tu manita izquierda!!!! y escuchas el ruido: crack crack, el hueso al final....

estrellitas y frutillitas alrededor de tu cabeza....
No hay más recuerdos del submarino tradicional post primera comunión....
Sí del primer yeso.
Funde a negro...

2 comentarios:

Marina dijo...

Para mi que fuimos a la misma primaria y no sabíamos.
Estoy viendo a la fatso puber con el diente de oro, la tira de caramelos fizz y los copos inflados maravillosos, también conocidos como "tutucas".

Qué gusto tiene la ostia?
Y al little leichon le vendieron el buzón que tenía gusto a turrón. Turrón de kiosko de primaria. Turrón Namur. Y a ella se le hacía agua la boca! Y no veía la hora de "comulgar". Finalmente llegó el día,previa "confesión" a puertas abiertas -qué crueldad!- cuando le tuvieron que decir "hablá más bajito Marina"[...prefiero creer que era la acústica del lugar y no los niveles de voz que a tan corta edad manejaba.] Y junto al gran día, la desilusión. Ma qué turrón ni turrón?!!!

Sol dijo...

yo te dije que eramos hermanas!